No obstante estar operativo con base a instalaciones provisorias, terminadas y entregadas en abril del año 2014 (como solución a los efectos de un fuerte incendio), el proyecto definitivo del lado chileno se definirá a través de un estudio diagnóstico a licitar en el corto plazo (MS$ 620, financiado por el F.N.D.R, 10 meses de plazo) que considera distintas áreas de análisis: arquitectura, agua potable, alcantarillado, sistema eléctrico y de suelos. Se pretende generar un anteproyecto de arquitectura para construir el complejo definitivo que permitirá dar solución al alto flujo actual. La demanda actual permitió generar un proyecto de construcción de un nuevo complejo fronterizo, en su etapa de pre factibilidad y factibilidad, que pueda dar respuesta a la modalidad de paso integrado doble cabecera con presencia de servicios chilenos y argentinos.